El presidente de la Nación, Javier Milei, recibió esta tarde a su par de El Salvador, Nayib Bukele, en la Casa Rosada, en busca de reforzar los lazos entre ambos países. Bukele, quien arribó a Buenos Aires el pasado jueves, mantuvo reuniones privadas en la antesala a esta primera visita oficial al país sudamericano desde que asumió la presidencia en 2019. La reunión estuvo marcada por la intención de fortalecer la cooperación en la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado, una batalla que ambos líderes han usado de bandera en sus respectivas gestiones.
Aunque no es la primera vez que Milei y Bukele se encuentran, sí fue su primera reunión oficial en suelo argentino. En junio de este año, el mandatario argentino ya había viajado a San Salvador para asistir a la investidura de Bukele en su segundo mandato consecutivo, lo que sentó las bases de una relación diplomática fluida. "Tengo la mejor impresión del mundo sobre Milei, me encanta lo que hace, somos amigos y vamos a lograr cosas buenas para ambos países", afirmó Bukele al ingresar a Casa Rosada.
La relación entre ambos países se ha consolidado en parte gracias al rol que jugó Patricia Bullrich, ministra de Seguridad, quien a inicios de este año viajó a El Salvador para reunirse con Bukele. Durante esa visita, Bullrich recorrió el Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT), una mega prisión diseñada para albergar a miles de miembros de pandillas salvadoreñas. En ese marco, la ministra firmó un convenio con el gobierno de Bukele para colaborar en la lucha contra el crimen organizado, lo que sentó las bases para una mayor cooperación entre ambas naciones en materia de seguridad .
En la visita de Bukele, ambos mandatarios también buscarán afianzar posturas comunes en el escenario internacional. Recientemente, coincidieron en la Asamblea General de la ONU, donde Milei y Bukele expresaron duras críticas hacia el organismo. El presidente argentino cuestionó la Agenda 2030, a la que describió como un "proyecto colectivista" que impone ideologías socialistas a los Estados, mientras que Bukele centró su discurso en la inseguridad global y la decadencia de los valores occidentales. Ambos mandatarios parecen estar alineados en su visión crítica hacia las organizaciones internacionales.
Milei ha defendido la necesidad de "abandonar la posición de neutralidad" que Argentina había mantenido en muchos temas internacionales, proponiendo en su lugar lo que denomina "la agenda de la libertad". Esta visión, orientada a la promoción del libre mercado y la reducción del intervencionismo estatal, ha sido una de las banderas de su gobierno desde que asumió el cargo en diciembre de 2023. Bukele, por su parte, ha utilizado su gestión para hacer frente al crimen con mano dura, implementando políticas de seguridad que, aunque controvertidas, han sido populares entre la población salvadoreña.
A lo largo de su mandato, Bukele ha sido criticado por su enfoque autoritario en la lucha contra el crimen, especialmente en relación con su uso del estado de excepción para combatir a las pandillas. Sin embargo, su estrategia ha reducido drásticamente los índices de criminalidad en El Salvador, lo que le ha permitido consolidar un alto nivel de apoyo. Esta gestión de seguridad, a pesar de las denuncias por violaciones a los derechos humanos, ha logrado posicionarse como uno de los líderes más influyentes de la región .
El intercambio entre Argentina y El Salvador en temas de seguridad parece destinado a profundizarse, con ambos gobiernos comprometidos a fortalecer su cooperación. Además, se espera que el encuentro en la Casa Rosada sirva para afianzar acuerdos en otras áreas, como el comercio y la tecnología. Sin embargo, el eje de la discusión será, sin duda, la seguridad y la forma en que ambos mandatarios pueden compartir experiencias y estrategias para hacer frente a los desafíos que presentan las organizaciones criminales en sus respectivos países.
Milei, quien ha basado gran parte de su discurso en la necesidad de implementar reformas estructurales, ha señalado en varias ocasiones a Bukele como un ejemplo de liderazgo efectivo en la región. El presidente argentino ha elogiado la capacidad de su par salvadoreño para “poner orden”. Con este encuentro, se espera que la cooperación bilateral tome un nuevo impulso, especialmente en la implementación de políticas de seguridad más agresivas en Argentina, similar a las de Bukele en El Salvador.
Tras el encuentro en la Casa Rosada, se prevé que ambos mandatarios firmen un acuerdo marco para fortalecer la cooperación en seguridad. Además, se espera que el presidente salvadoreño continúe con reuniones con sectores políticos y empresariales de Argentina, buscando generar nuevos vínculos comerciales y de inversión en el marco de su visita oficial. Por la noche, los mandatarios cenarán juntos en la Quinta de Olivos y mañana por la noche el salvadoreño regresará a su país.