En lo que va del año, el precio de la nafta aumentó un 24% en la provincia de Santa Fe, quedando por encima de la inflación. El dato se desprende del último informe del Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (Ceso), donde además se apunta que llenar el tanque en Rosario costó 13.700 pesos más que en enero.
El aumento de los combustibles también redundó en una caída en las ventas: en la provincia bajó un 4% en comparación con el año pasado. Desde el organismo también pusieron el foco en la desregulación impulsada por el gobierno, que desobliga a las estaciones de servicios a informar los aumentos. “Esto es una sorpresa para los consumidores y empieza a impactar tanto en los bolsillos como en los niveles venta”, explicó Celina Calore, referente del Ceso. “Es importante seguir el comportamiento de los combustibles, porque es un precio que suele trasladarse al resto de la cadena”, añadió.
Según el relevamiento del Ceso, el incremento a septiembre fue del 24%, cuando la inflación acumulada desde principio de año fue del 22%. Desde el organismo también señalaron que, solo en septiembre, hubo al menos tres incrementos que dejaron un acumulado del 5%. Asimismo, en lo que va de octubre los precios volvieron a subir “acentuando la brecha entre inflación y aumento de precios de las naftas”.
El informe también aborda el precio de la nafta súper en las principales localidades de la provincia. El valor más alto se registra en Rafaela, con 1.573 pesos el litro, seguido por Reconquista, con 1.566 pesos. Le sigue Rosario (1.527 pesos), Santa Fe (1.511 pesos) y Venado Tuerto (1.510 pesos). Los precios también variaron según el tipo de combustible: gasoil común un 25%, nafta súper un 24%, nafta premium 22%, y el gasoil premium un 19%.
En ese marco, llenar un tanque de 50 litros con nafta súper en Rosario costó en septiembre 76.350 pesos, unos 13.700 pesos más que en enero. Mientras que un camionero de Santa Fe tuvo que gastar 56.035 pesos para llenar el tanque con gasoil común, lo que le significó unos 11.515 pesos más que a principio de año.
Como consecuencia de los aumentos, desde el Ceso registraron una baja en las ventas de combustibles del 4% interanual. Si la comparación se realiza con 2023, la baja llega al 10%. Más pronunciada aún fue la caída en las ventas de gasoil común al público, que bajaron un 13% respecto a agosto de 2024. Para la nafta súper, la venta se mantiene en “niveles similares”, según marca el informe.
R12
“Lo primero que nosotros resaltamos es que, en lo que va del año, los precios de los combustibles aumentaron por encima de la inflación en la provincia de Santa Fe. Es algo que se alinea con lo que sucede a nivel nacional. Hasta septiembre registramos dos puntos por encima, pero ya notamos que en las primeras semanas de octubre hubo nuevos incrementos”, explicó Calore en diálogo con Rosario/12. “Lo que evaluamos es que los aumentos van asociados a las modificaciones que hubo en el tipo de cambio y las presiones cambiarias”, añadió.
En esa línea, la economista explicó el precio de los combustibles va atado al valor internacional del barril de petróleo. Sin embargo, también puso el foco en las decisiones tomadas por el gobierno: “Una de las consecuencias de la desregulación va por ese lado, que es tener incrementos semanales de los precios. Quizás en el análisis puede que los aumentos no parezcan demasiados altos, pero eso se va acumulando y encima ahora ni siquiera se informan los aumentos”.
Andá a enterarte
El informe del Ceso cobra relevancia teniendo en cuenta que las estaciones de servicios ya no están obligadas a informar los aumentos de precios. Así lo dispuso el gobierno nacional con la publicación de la resolución 717 publicada en junio de 2025, donde se deroga la norma que obligaba a los titulares de bocas de expendio a informar cualquier cambio en los precios de los combustibles líquidos y del gas natural comprimido. La resolución derogada daba un plazo de ocho horas para informar las modificaciones en el surtidor.
“A diferencia de lo que pasaba anteriormente, los aumentos no vienen siendo informados por las estaciones de servicios. Esto lo que genera es que los usuarios van a llenar el tanque y se encuentren con que le salió más caro que la semana anterior, sin haberse enterado que hubo aumentos. Esto es una sorpresa para los consumidores y empieza a impactar tanto en los bolsillos como en los niveles de venta”, indicó Calore. Y añadió: “Es importante seguir el comportamiento de los combustibles, porque es un precio que suele trasladarse al resto de la cadena”.
En ese sentido, desde el Ceso remarcaron que la mayoría de los bienes que encontramos en las góndolas de supermercados se trasladan por vía terrestre. “El componente de los combustibles es un peso importante en el precio final de cada bien que consumimos. Es un precio estratégico de la economía que hay que seguir de cerca, porque nos va marcando el ritmo de los costos de producción, además del usuario final también”, finalizó.