Un exhaustivo relevamiento realizado por su equipo de trabajo sobre 261 cuadras, aproximadamente 11kilómetros, reveló que el 90% de las veredas tiene hundimientos o roturas en algún tramo, lo cual dificulta la movilidad. “El resultado es contundente”, evaluó la edil Anahí Schilbelbein.
“Las cuadras a refaccionar no fueron elegidas al azar sino que su selección responde a un riguroso trabajo que contempló aquellos corredores que unen puntos estratégicos del orden administrativo, bancario, escolar, comercial y turístico de Rosario. Es decir, son cuadras con un alto nivel de tránsito peatonal y por las cuales hoy se hace muy dificultoso el paso”, explicó.
Debido a la necesidad de gestionar las reparaciones en las veredas, la concejala mantuvo un encuentro con el gobernador Maximiliano Pullaro y con el intendente Pablo Javkin. “Primero hablé con el gobernador y estuvo de acuerdo, luego le hice la propuesta al intendente de la ciudad que también dio su aprobación y a partir de ese diálogo hice la presentación en el Concejo. La otra semana se estará tratando”, detalló la edil durante una entrevista con INFOROSARIO.
Ante el gobernador Pullaro tramitó los fondos necesarios para el arreglo de los baches y Javkin hizo algunas sugerencias que serán tenidas en cuenta para la redacción final de la iniciativa.
¿Cuáles serán las veredas a reparar?
Entre los 11 kilómetros que comprenden las 261 cuadras, aquellas que muestran el mayor nivel de deterioro son Urquiza al 800; Santa Fe al 800; Rioja al 600, al 700, al 1200, al 1400, al 1500, al 1600; San Luis al 700 y desde el 1400 al 1900; Mendoza al 1100 y al 1200; 3 de febrero al 900; Moreno al 800; Presidente Roca al 100, al 200, al 400, al 600 y al 800; Corrientes al 800, al 1000 y al 1100, Entre Ríos al 200, al 300, al 1400 y al 1500; Mitre al 800 y al 900; Sarmiento al 1200; Sargento Cabral al 400; Laprida al 900 y al 1000; Buenos Aires al 800, al 900, al 1000 y al 1200; y Juan Manuel de Rosas al 800 y al 900.
“Es importante el trabajo mancomunado de todos los poderes del Estado en estas cuestiones que apuntan a resolver cuestiones cotidianas que hacen al día a día de los rosarinos. Todas las veredas contempladas conforman entre si un circuito de alto tránsito de quienes visitan el centro de la ciudad por diferentes necesidades”, agregó la concejala.
Asimismo, Schilbelbein reflexionó: “Es necesario y tenemos que tender a construir una ciudad habitable por todos, y lo que más hace al confort es poder moverse con autonomía. Por lo cual es fundamental poder caminar en condiciones seguras. A los que me cuestionan por qué el centro les digo que por algún lugar teníamos que arrancar y me parece pertinente que sea por acá. Luego extenderse a otros lugares que necesitan”.
Luego de las respuestas afirmativas de ambas autoridades remarcó que “demostraron un gran compromiso de llevarlo a cabo en la inmediatez”.
Finalmente señaló: “Nuestra tarea también es construir consenso, no solo aquí con los colegas, también con el Ejecutivo. Todos somos funcionarios públicos y tenemos una responsabilidad que el rol nos demanda”.
