“Escandalosa, bochornosa e inmoral”, así calificó la legisladora provincial la actuación del fiscal de Estado. “Ya anticipé que era un impresentable y no me equivoqué”, sentenció Granata y en su discurso en la sesión pidió al Ejecutivo una respuesta ante la grave denuncia que realizó.

La Corte Suprema de la Provincia falló a favor de las víctimas de la inundación de 2003, y Rondina seguía representando a las víctimas cuando era fiscal de Estado. “No quiere apelar como fiscal para recibir la torta de plata que va a recibir como representante legal”, indicó Amalia Granata. Luego de sus contundentes declaraciones, INFOROSARIO dialogó con la diputada para solicitarle más detalles.

-¿Cuándo tomaste conocimiento de este accionar del fiscal de Estado?

-Cuando se votó la designación de este señor mi bloque votó en contra. Yo ya venía padeciendo su hostigamiento por Twitter hace años, de hecho, cuando me manifesté en ese momento en la Cámara mostré todos los tweets, no solo dirigidos hacia mi persona y sino también hacia un montón de gente; su conducta para asumir como fiscal de Estado no me parece la adecuada, con ese nivel de agresividad. Votamos en contra de su designación y luego me empezó a llegar la información de que él patrocinaba a las víctimas de la inundación del 2003, que era totalmente incompatible con su función de fiscal de Estado. Con esta maniobra él quiso hacer una sustitución y poner a su mujer (la Dra. Bachmann) para que cobre los honorarios. Eso no se puede hacer, él debería haber renunciado a los honorarios y a patrocinar a la gente. No solo no renunció, sino que quiso pasar la causa a su mujer, para que ella cobrara los honorarios. Como esto no lo pudo hacer, le pasó la causa al socio de su estudio. Cuando la Corte les da la razón a las víctimas, él pidió un pronto despacho, algo ya inédito. Como la perjudicada resultó ser la Provincia, en vez de apelar pidió un pronto despacho, para pedir el pago. Esto es un escándalo, yo desconozco si el Ejecutivo sabía de las maniobras de este señor, no sé si se enteraron el jueves o ya lo sabían. Como no lo quisieron tratar sobre tablas, lo quisieron mandar a comisiones, pedí manifestarme y conté lo sucedido. Me llamaron muchos medios, pacté entrevistas y a la media hora me cancelaron.