El joven de 21 años escrachado durante una marcha en Piñero el pasado 9 de octubre fue acusado formalmente por los delitos de grooming y amenazas simples.

Se trata de Nahuel Cabrera, quien transitaba el proceso en libertad, una decisión que fue cuestionada por la familia de la víctima, que pidió a la Justicia provincial “ponerse en el lugar de la adolescente”.

La madre de un a víctima pidió justicia por su hija que  “está con psicóloga, no está yendo a la escuela ni está saliendo” de la casa. “Las pruebas están a la vista. El chico es astuto para manipular. Le pido a los jueces y a la Fiscalía que se pongan en el lugar de la víctima para que no le pase a más nadie”, comentó.

Por último, Patricia aseguró que hay más víctimas e instó a denunciar a Cabrera, quien fue imputado el 17 de octubre. 

“Queremos que vean bien el caso, que consideren todas las pruebas. Nosotros no inventamos nada. Después de la marcha la comuna clausuró la iglesia. No estamos tranquilos, no sabemos si va a concretar las amenazas. Cuando salimos miramos para todos lados, vivimos traumados”, señaló Gregorio, padre de la menor. 

Un dato que dieron los familiares de la chica es que Héctor Cabrera, padre del imputado, fue condenado el 29 de agosto de 2023 a la pena de 30 años de prisión por varios casos de violación ocurridos entre 2015 y 2020, algunos de ellos, cometidos dentro de la iglesia Tabernáculo de Restauración, situada en Batlle y Ordóñez al 1800, en la zona sur de Rosario.