Desde la Empresa Movi confirmaron que las unidades adquiridas en 2017 presentan problemas que impiden hacer el recorrido autónomo. La falla había sido detectada en 2018, cuando los colectivos estaban en garantía pero no se pudo solucionar. El municipio anunció que momentáneamente dejará de funcionar y se reforzarán los servicios de la K y el 127.

En el año 2017 la firma rusa Trolza tuvo demora para la entrega de unidades y en el Ente de la Movilidad estaba como titular Mónica Alvarado.

El representante ruso en el 2016 Sergey Dercach anunciaba con bombos y platillos que los coches contaban con aire acondicionado, cuatro cámaras de videoseguridad y transmisor de GPS.
En ese momento se señalaba que cada coche eléctrico que se compraba valía el doble que un coche común.