El ‘Xeneize’ lo ganaba 2 a 1, pero apareció Vallejo y estampó el 2 a 2. En Avellaneda, Racing no aprovechó su oportunidad y perdió 2 a 1 con un River que dio la talla. Borja convirtió un doblete y Armani tapó un penal clave sobre el final. Primer título para Hugo Ibarra como entrenador.

A pesar de que Boca Juniors no ganó en su cancha ante Independiente y empató 2 a 2, se consagró como nuevo campeón del fútbol argentino. Fue posible gracias a un River que se impuso 2 a 1 ante River en el Cilindro de Avellaneda, con un doblete de Borja y una atapada clave de Armani sobre el final.
En los primeros minutos, el ‘Xeneize’ se mostró con la vocación de ser protagonista y de manejar la pelota en la mitad de la cancha. Del otro lado, el ‘Rojo’ espera atrás de la línea de la pelota a la espera de un contraataque.
La primera acción llegó a los cinco minutos de la mano de Pol Fernández. Luego de una triangulación de Fabra con Ramírez, el volante le pegó al arco y terminó tapando la pelota el arquero Álvarez, que la mandó al córner.
Una mala noticia recibió Boca a los pocos minutos de juego. En una acción, Fabra fue fuerte ante el lateral Vigo y recibió la tarjeta amarilla, por lo que no podrá estar presente para la final del Trofeo de Campeones. También se sumó a esto ‘Pol’ Fernández, que vio la cartulina amarilla a loas 15′ de juego. Del otro lado, Leandro Fernández fue amonestado por protestar.
En medio de un duelo trabado, las emociones llegaron a La Bombonera en una fracción de cinco minutos. A los 30 minutos, Advíncula cometió una infracción sobre su costado y fue penal para el ‘Rojo’. El VAR dudó de la firme decisión de Herrera de cobrarlo, pero lo terminó convalidando. Y desde los 12 pasos, Leandro Fernández convirtió el 1 a 0, pese a que Rossi le adivinó el lugar.
Minutos después, a los 34 minutos, Boca encontró una falta sobre el costado derecho que capitalizó mediante una exquisita pegada del paraguayo Romero y un cabezazo providencial de ‘Pol’ Fernández para inflar la red de Álvarez.
Al poco tiempo del gol, Boca siguió atacando y a los 40 minutos tuvo una clara acción en un contragolpe que supo construir Romero con Fabra, este último llegando al área, pegándole al arco y con la tapada final de Álvarez.
En el segundo tiempo, Hugo Ibarra movió el banco de suplentes y decidió que salga Juan Ramírez, de flojo rendimiento, para que se de el ingreso de Sebastián Villa. Y el colombiano terminó cumpliendo. A los cinco minutos de juego, desde el costado izquierdo, le pegó un zapatazo espectacular que entró en el ángulo derecho de Álvarez.
El clima empezaba a ponerse espeso en La Bombonera cuando los hinchas se enteraron que Racing le convertía un gol de penal a River y pasaba al frente 1 a 0, lo que parcialmente obligaba a Boca a mantener este resultado para ser campeón.
En el pasaje del segundo tiempo llegó lo peor para un Boca que sufrió mucho defensivamente. En un córner, se desatendieron las marcas y apareció el joven Vallejo a los 81 minutos para estampar el 2 a 2 y enmudecer a La Bombonera.
Pero en La Ribera hubo un momento de alivio: al mismo momento que le empataban el partido a Boca, en Avellaneda aparecía el colombiano Miguel Borja en River para imponer el 1 a 1 frente a Racing en el Cilindro.