Hoy el diario La Capital describe el pliego de la basura en Rosario. Reproducimos nota.

A poco de que el Ejecutivo envíe al Concejo Municipal el pliego para licitar por los próximos ocho años el nuevo sistema de residuos, la contratación más costosa que tiene la ciudad (cercana a los 6 mil millones de pesos anuales), los grupos ambientalistas pusieron la propuesta bajo la lupa y ya hubo críticas. “Es fácil vislumbrar que el nuevo pliego representa más de lo mismo”, señalaron sin medias tintas quienes integran el Taller Ecologista y el Movimiento de Trabajadores Excluidos de Rosario (MTE) a través de un comunicado, donde además afirmaron que el modelo actual de la gestión de residuos es “insustentable” .
Se sabía de antemano que 2022 sería un año clave para la renovación del servicio, así lo anticipó el intendente Pablo Javkin en la apertura de sesiones en el Concejo semanas atrás y en las últimas horas desde el Palacio de los Leones se anunció que los pliegos para la nueva licitación estarían llegando a manos de los concejales durante los primeros días de abril.
Se trata del contrato más costoso que abona la Intendencia, cercano a los 6 mil millones de pesos anuales en la actualidad, que para los próximos ocho años se propone mejorar la prestación del servicio a través de la renovación de los 9.500 contenedores instalados en la ciudad, además de un sistema de monitoreo en tiempo real de la limpieza de los receptáculos.
El proyecto también prevé avanzar con la separación en origen y en los siguientes tres años que el 45 por ciento de la población ya esté dividiendo reciclables, de modo tal de reducir las 800 toneladas diarias que aún hoy se entierran en el relleno sanitario de Ricardone y que están muy lejos de haber cumplimentado con la ordenanza Basura Cero sancionada por el Concejo Municipal.
Además de las objeciones a la iniciativa en sí misma, las organizaciones señalaron que en ambos casos y en forma conjunta vienen presentando “propuestas integrales de gestión de residuos en la ciudad”, que hasta al momento fueron desoídas; al tiempo que insistieron en la necesidad de que se abran “espacios de participación, hoy ausentes”.
Las objeciones
Las organizaciones consideran que la nueva apuesta del municipio es la misma que llevó hasta ahora al fracaso de la ordenanza Basura Cero y así lo señalaron a partir del conocimiento de los pliegos para el nuevo contrato que desde abril deberá pasar por las manos de los concejales.
“Es fácil vislumbrar que el nuevo pliego representa más de lo mismo”, afirmaron desde el Taller Ecologista y el MTE y agregaron que el proyecto “se sigue apostando al mismo sistema de recolección que demostró ser un fracaso para cumplir con la ordenanza Basura Cero”.
Además, consideraron que el Ejecutivo se repite ya que “las metas enunciadas son exactamente las que ya anunciaron en 2021 con el envío de una propuesta de modificación de Basura Cero” y ratificaron el rechazo contundente que una veintena de organizaciones ambientalistas plantearon a gobierno local ya en ese momento “por considerar que no aportaba a producir un cambio real en la gestión de residuos”.
Incluso recordaron que las propias organizaciones acercaron una propuesta legislativa para relanzar el proyecto Basura Cero y potenciar la ordenanza cuyas metas nunca fueron alcanzadas, así como también la iniciativa de crear un Servicio Público de Recuperación de Residuos Reciclables, para propiciar dispositivos de integración de cartoneros y cartoneras al sistema formal de reciclaje, iniciativas que “hasta hoy nunca han sido contempladas”.
“En la ciudad hay más de 3.000 cartoneros cuyo trabajo permite que cada año miles de toneladas de residuos sean recicladas, mucho más que lo que logran los programas municipales -señalaron en el comunicado desde el MTE-. Necesitamos discutir qué lugar tienen en la política pública de reciclaje, necesitamos discutir un sistema de gestión de residuos con inclusión social”.
“Decepción mayúscula”
Así como recordaron haber estado entre las organizaciones que hace 15 años impulsaron el proyecto Basura Cero, el Taller Ecologista mencionó la falta de espacios de diálogo e intercambio, e incluso indicó que desde hace cinco años la comisión de seguimiento de esa ordenanza no es convocada.
“Tampoco vemos ningún indicio de que se considere convocar a audiencias públicas, tal como ocurrió por ejemplo con el pliego de higiene urbana presentado en el 2008”, indicaron.
Por otra parte, sobre lo medular de la propuesta, desde el Taller Ecologista consideraron que “el modelo actual de gestión es insustentable y no ha servido para cumplir con los propósitos de la ordenanza vigente”.
Y si bien no ocultaron “alguna expectativa respecto de la gestión de Javkin por su trayectoria previa en materia de residuos”, se lamentaron que “se siguen repitiendo esquemas que demostraron no funcionar” y agregaron: “Por ahora la decepción es mayúscula”.