La batalla de Javier Milei contra los gremios y gobernadores no será lineal o uniforme. No hay monobloques armados entre el Presidente frente a los mandatarios provinciales y sindicalistas. Más bien, el jefe de Estado tiene prevista una estrategia de negociación política que deriva en un mapa dividido en extremos: los más dialoguistas por un lado y los duros del otro.
Bajo esta premisa es que Milei prevé armar su "nuevo tablero de la política" en donde están por un lado aquellos gobernadores o gremios que quedarán "expuestos", como le gusta mencionar al Presidente y los que lo acompañan en la cruzada libertaria contra la "casta".
La visita de Milei a Corrientes donde estuvo con el radical Gustavo Valdés y el chaqueño Eduardo Zdero formó parte del mapa que se armó el Presidente para entablar vínculos con las provincias. El mismo esquema se extiende a los gremios.
Los dialoguistas
En el caso de los gobernadores el Presidente ubica entre los dialoguistas a Valdés, Zdero, Alfredo Cornejo (Mendoza), Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Hugo Passalacqua (Misiones), Gustavo Sáenz (Salta), Jorge Macri (CABA), Carlos Sadir (Jujuy) e incluso los peronistas Raúl Jalil (Catamarca) y Osvaldo Jaldo (Tucumán).
Bajo la mirada de este mapa el gobierno seguirá tendiendo puentes. El ministro del Interior, Guillermo Francos, viajará hoy a Salta para mantener una reunión con los mandatarios de Misiones, Tucumán, Catamarca, Salta y Jujuy.
A la vez, Francos tiene previsto ir a Mendoza para la fiesta de la Vendimia y entablar allí el diálogo con los mandatarios de la UCR.
"Hay gobernadores que entienden que hace falta hacer un esfuerzo, ajustar cuentas y marchar al déficit cero. Con ellos se podrá ir por el mismo camino", expresó a la prensa un destacado funcionario del Gobierno.